Legislatura GPPAN

El Vicecoordinador del GPPAN, Christian Von Roehrich apuesta por regularizar al trabajo doméstico e instaurar derechos a quienes ejercen estas labores, por lo que asumió el compromiso de legislar al respecto sobre remuneración igualitaria y seguridad social.

“El hecho de que, en su mayoría, el trabajo doméstico sea ejercido por mujeres, convierte el tema en un asunto de doble discriminación”, expuso en Tribuna al exhortar al Presidente de la República para que remita al Senado el Convenio 189 y la Recomendación 201 de la Organización Internacional del Trabajo sobre la labor doméstica y sea ratificado por dicho órgano legislativo.

De acuerdo al panista, el trabajo doméstico ha sido invisibilizado y no se considera con la relevancia suficiente para legislar al respecto. “Con base en el Convenio 189 de la OIT, el aspecto de la remuneración es fundamental, ya que se busca establecer una remuneración igualitaria y suficiente para este sector de la población”.

Añadió que hoy en día nuestro país carece de una regulación clara en materia salarial, de horarios, prestaciones y seguridad social, además de someterse a tratos discriminatorios.

“Se trata de crear bases legales para esta actividad en nuestro país, con lineamientos claros y puntos específicos para incluir en la legislación nacional y, entonces sí, establecer un piso de protección para las y los trabajadores domésticos de nuestra nación”.

Von Roehrich dijo que para que este Convenio surta efecto debe ser firmado por el Ejecutivo Federal y ratificado por el Senado de la República, sin embargo, eso no ha sucedido pese a que la Cámara alta ha solicitado el envío del Convenio a esa Soberanía para aprobarlo.

Ante los riesgos que implican estas labores que van desde limpieza en general, cuidado de menores o de adultos mayores, jardinería, vigilancia, desempeño como chofer u otras actividades, no existen normas claras al respecto.

En México, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), existen 2.2 millones de personas dedicadas al trabajo doméstico.

Adicionalmente, ese censo refleja que el promedio de edad de las personas que realizan el trabajado doméstico, es de 43 años, edad en la que se comienzan a requerir más opciones de atención médica y se perfilan
laboralmente a un retiro necesario.